ALTA FIDELIDAD
Al perfume, la he superado. Lo mío me costó, que me tiré un montón de años siendo fiel a Carolina Herrera, pero conseguí vencer mi fidelidad al perfume viendo todas las ofertas del mercado en este terreno y, gracias a los perfumes regalados, fui superando la fidelidad al perfume.
Pero en nada más.
La melena, por ejemplo, me acompaña de siempre, pelín más larga, pelín más corta, pero ahí está siempre conmigo, no puedo abandonarla, le soy fiel.
Ron con cocacola, si tomo copa, no hay otra opción, oscuro el ron, claro está, que el único y verdadero ron es el oscuro, no puedo ver más, que le soy fiel al oscuro ron desde ni me acuerdo ya cuándo.
La braga. Que están de moda los tangas, ya lo sé, pero a mí me van las bragas, de siempre. ¡Ah! Que no se me olvide en este tema que lo mío es la lencería fina, así de encaje y tal, como sexy con charm, por mucho que me parezcan monísimos los conjuntos (otro detalle, siempre conjuntos, nada de desparejados) deportivos, infantiles, de algodón y demás modernidades, nada, no hay forma de abandonar mi fidelidad lencera.
El amor, no se me olvide tampoco. Que sigo siendo fiel a la idea romántica de un amor brutal que lo ocupe todo, de tener un compañero de equipo con el que nada ni nadie me parezca un obstáculo, pese a haber descubierto ya que este tipo de fidelidad es un tanto surrealista. Y claro, en consecuencia, al sexo con amor, que no le veo yo el encanto o la magia al sexo sin más.
La amistad. Como concepto, quiero decir, que soy fiel a esa idea (creo que de nuevo estúpidamente romántica) de la amistad en la que no hay envidias, ni celos, ni dudas, ni enfados, sencillamente porque si se es amigo, no hay cabida a ninguna de esas cosas. Que cuando creo que por fin he asumido que alguien de quien yo era amiga no es recíproco en sus sentimientos conmigo, cuando creo que he conseguido adaptar mi actitud a eso que digo en voz alta de que "la amistad es camino de doble dirección", aparece en escena ese alguen y a tomar por el culo todas mis convicciones repetidas en alto, la fidelidad me demuestra que sigo siendo la perfecta imbécil de siempre, fiel a ese sentir amistoso.
Pero en nada más.
La melena, por ejemplo, me acompaña de siempre, pelín más larga, pelín más corta, pero ahí está siempre conmigo, no puedo abandonarla, le soy fiel.
Ron con cocacola, si tomo copa, no hay otra opción, oscuro el ron, claro está, que el único y verdadero ron es el oscuro, no puedo ver más, que le soy fiel al oscuro ron desde ni me acuerdo ya cuándo.
La braga. Que están de moda los tangas, ya lo sé, pero a mí me van las bragas, de siempre. ¡Ah! Que no se me olvide en este tema que lo mío es la lencería fina, así de encaje y tal, como sexy con charm, por mucho que me parezcan monísimos los conjuntos (otro detalle, siempre conjuntos, nada de desparejados) deportivos, infantiles, de algodón y demás modernidades, nada, no hay forma de abandonar mi fidelidad lencera.
El amor, no se me olvide tampoco. Que sigo siendo fiel a la idea romántica de un amor brutal que lo ocupe todo, de tener un compañero de equipo con el que nada ni nadie me parezca un obstáculo, pese a haber descubierto ya que este tipo de fidelidad es un tanto surrealista. Y claro, en consecuencia, al sexo con amor, que no le veo yo el encanto o la magia al sexo sin más.
La amistad. Como concepto, quiero decir, que soy fiel a esa idea (creo que de nuevo estúpidamente romántica) de la amistad en la que no hay envidias, ni celos, ni dudas, ni enfados, sencillamente porque si se es amigo, no hay cabida a ninguna de esas cosas. Que cuando creo que por fin he asumido que alguien de quien yo era amiga no es recíproco en sus sentimientos conmigo, cuando creo que he conseguido adaptar mi actitud a eso que digo en voz alta de que "la amistad es camino de doble dirección", aparece en escena ese alguen y a tomar por el culo todas mis convicciones repetidas en alto, la fidelidad me demuestra que sigo siendo la perfecta imbécil de siempre, fiel a ese sentir amistoso.
El mar. No puedo evitar volver siempre a su lado. Me gusta la montaña, especialmente los bosques, pero el mar me tiene ganada, es más, hasta me siento culpable si disfruto casi (nunca es igual, pero a veces es casi) tanto como en el mar paseando por el campo, porque la fidelidad al mar me recuerda cual es mi emoción primera.
Mi amor. Cuando lo tengo, no hay nadie más. No veo otros hombres, no existen, directamente. Si es amor, es inevitable serle fiel, no hay esfuerzo alguno en ello, simplemente es así: fiel por vocación, por imposibilidad de no serlo, sin mérito alguno.
Mi amor. Cuando lo tengo, no hay nadie más. No veo otros hombres, no existen, directamente. Si es amor, es inevitable serle fiel, no hay esfuerzo alguno en ello, simplemente es así: fiel por vocación, por imposibilidad de no serlo, sin mérito alguno.
Los perros. Puedo incluso concretar más: las perras. Que los bichos en general me encandilan todos, desde las ranas a los peces, pasando por las tortugas y los ciervos, que he tenido en casa patos, pájaros, codornices, conejos y hasta un puercoespín, pero un perro, es un perro. Mejor dicho: una perra es una perra. Podría tener en casa ahora un gato, que no necesita tanta atención como un perro y me vendría muy bien encontrarme a alguien esperándome todas las noches, pero no puedo hacerle eso al mundo canino, que yo soy de perro (perra, Glauka, mejor perra) y siento que sería infiel si acepto el gatito ese que me han ofrecido y que me ha tentado sobremanera. Nada. Fidelidad ante todo. Nada de gato.
Mis blogueros. No puedo dejar de leerles a diario. Me encariño y estoy perdida, ni en esta maldita red se diluye esa imposibilidad. Intento diversificar, vale, pero no hay manera, amplío posibilidades para romper ese nudo que me ata a determinados blogerfriends porque no debiera trasladar esa forma mía de vivir aquí, pero nada, se repite una y otra vez la fidelidad de las narices.
Si es que ni en el messenger puedo charlar con más de una persona, no digo ya a la vez, no, es que incluso ahí mi territorio de actuación se limita a contadas personas, no me gusta charlar con alguien y dejar en espera a nadie, no me gusta esa sensación de estar eligiendo con quien estar.
La pasta. Me gusta la pasta italiana y por mucho que pruebe platos suculentos, como la pasta, nada de nada. Puedo disfrutar con otras cosas, no digo que no, pero la sensación placentera post pasta, consigue que sea ella mi plato favorito.
Mis blogueros. No puedo dejar de leerles a diario. Me encariño y estoy perdida, ni en esta maldita red se diluye esa imposibilidad. Intento diversificar, vale, pero no hay manera, amplío posibilidades para romper ese nudo que me ata a determinados blogerfriends porque no debiera trasladar esa forma mía de vivir aquí, pero nada, se repite una y otra vez la fidelidad de las narices.
Si es que ni en el messenger puedo charlar con más de una persona, no digo ya a la vez, no, es que incluso ahí mi territorio de actuación se limita a contadas personas, no me gusta charlar con alguien y dejar en espera a nadie, no me gusta esa sensación de estar eligiendo con quien estar.
La pasta. Me gusta la pasta italiana y por mucho que pruebe platos suculentos, como la pasta, nada de nada. Puedo disfrutar con otras cosas, no digo que no, pero la sensación placentera post pasta, consigue que sea ella mi plato favorito.
Las lilas. Casi nunca tengo flores en casa, y me encantan las flores en los mercados, llenas de colores fantásticos, me vuelven loca las flores estallando en colores rojos y amarillos, pero se me van los ojos silenciosamente tras las flores de color lila, violeta, morado, inexplicablemente.
Mi trabajo. Mira que despotrico y despotrico, y aún así, sigo sintiendo a mi "jefe" (amo dueño y señor cuando me recalienta las neuronas) como alguien mío a quien necesito serle fiel.
Moreno de sol. Que he sentido tentaciones a veces de acudir a la famosa lámpara, que en ocasiones es de lo más oportuna, pero no, no caigo ni mal ni bien, moreno es sol, y lo contrario sería serle infiel al astro rey.
A mis principios.
Al recuerdo de mi ex.
A la crema de chocolate.
Al padre que veía con niños ojos.
A mis autores favoritos, Kundera y alguno más menos conocido no tienen ni idea, pero así les siento, con absoluta fidelidad.
A mis emociones y miedos.
A la música.
A un beso imaginado que humedece mis labios aún imaginando.
A las burbujas bajo el agua.
A las noches de luna llena.
A las tormentas.
A ti.
Nokia. Mira que tiene guasa. Que hasta el móvil tenga que ser siempre Nokia. Que hace un mes me he cambiado de móvil, y me tiré una semana mirando modelos, que había otros que me gustaba su estética puede que incluso más, que se me iban los ojos tras uno de esos extraplanitos tan chulos, pero finalmente, mi fidelidad eligió por mí, y Nokia es lo mío. Manda narices.
No digo que se la merezcan. No siempre se la merecen. Posiblemente, nunca se la merecen. Pero no se trata de eso.
Glauka
No digo que se la merezcan. No siempre se la merecen. Posiblemente, nunca se la merecen. Pero no se trata de eso.
Glauka
Etiquetas: MAR DE FONDO
32 Comments:
joe', pues sabes que no me lo había planteado, pero según iba leyendo iba afirmando, "yo también, yo también..." bueno, confieso una infidelidad, era fiel al güisqui con cola hasta que una mujer (siempre las mujeres... jeje) me hizo cambiar al ron, Santa Teresa o Cazique, no hay otro... y desde entonces también a eso soy fiel... y a Glauka también, of course.. jeje ;-) ¿es malo doctor?
Bueno...pues que hasta en la marca del móvil coincidimos...jaja.
...Lo único, que mi copa es el GIN TONIC, con BOMBAY SAPHIRE de la azulita,(aunque la LARIOS tampoco está mal...), y mi pelo...bueno, suelo ser más fiel al largo que al corto, pero a veces corto por lo sano... ;)
...Si es que leyendo a los otros se aprende tanto...se llega a estar tan cerca de este con este método tan...¿peculiar? ¿diferente?
besoos wapa.
me ha gustado a mi este post... me da que voy a hacer lo pripio respecto a mis fidelidades.. :)
me gustan tus fidelidades por cierto.. son altas claramanete
AVALÓN: JAJAJAJAJAJA! A Glauka hay que serle fiel siempre o se encabrona y te arremete un coletazo que te deja espachurrao, hecho una pegatina, al adoquín ;).Esa mujer era inteligentisima oye, te pasó al ron del bueno, del que me gusta a mí ... estuve a puntito de establecer mi fidelidad a Barceló y Cacique pero como en esto tengo dos favoritos, pues lo dejé en ron oscuro.
DULCINEA: Pues a lo tonto he descubierto un montón de cosas de ti. Besos!
LA DIVINA GILDA: Como la sirena, así de altas ;). Un beso enorme ante un atardecer de esos que espero estés viendo al menos alguna vez, en tierras granaínas eh?
Pues si tenemos muchas fidelidades comunes , muchas .
Mira si soy retorcida, que despues de leerte me he dicho, vamos a hacer una lista con nuestras "infidelidades"...
Lo que me haces pensar sirenita.
besos
CHURRA: De esas también tengo, no te vayas a creer, pero resulta que al no ser totalmente satisfactorias pues vuelvo a mis fidelidades de siempre ;).
DETRASDELREFLEJO: Gracias solete!
....vaya.... pues lo lamento, porque sin cambios.... yo no entiendo mi vida.... ah!.... los cambios.... ;)
Pues yo soy fiel, pero no tanto, aunque estoy de acuerdo en eso de la vocación a la fodelidad, que no tiene mayor mérito en lo que al amor se refiere
Se feliz
En los tiempos que corren este canto tuyo a la fidelidad no tiene precio, es más, yo creo que cotiza al alza y te define, una vez más.
Besos orgiásticos.
HUMILDE: Ya, que tú te pasas la vida en "cambio" continuo ya lo sabía rey ;). Besossssssss
ZIFNAB: Pues así es, no es cuestión de mérito porque no es algo que se haga de forma voluntaria, es innato. Y por eso me cuesta más comprender la no inanatez ajena ;). Besossssssss
ELA Y SU ORGÍA: Es que es terrible ver que ha desaparecido del código moral supongo, de las personas eso de la fidelidad, lealtad, o como quieras llamarlo. De todas formas, tampoco debe ser nada bueno el sentimiento de culpabilidad cuando rompes la fidelidad en cosas simples como lo del gato ;), que manda narices, y si es lo del móvil ya para qué contarte jejejejejejeje!!!!
Besos cochinos hoy para usted, porque sí, proque me apetece.
Creoq eu has conseguidoe lo mismo e fecto en todos, terminar diciendo: yo también, yo también ....jajja
Pues coincidimos en el ron, en el mar, en el nokia y en algunas más.
Me ha encantado, porque son conocerte terminas sintiendote cercana.Ahm yo este mes he añadido uan nueva fidelidad....a tu blog;)
Muak guapa
Precioso, Glauka. Muy tú misma, muy sincera, precioso. Te dejo un
Amor
grande.
¿"Una vez fue sirena" quiere decir que eres una sirena a la que visité hace tiempo en otra plataforma?)
Un beso grande, de
Amor
Creo que las fidelidades nos hacen sentir seguros y cómodos, porque ya conocemos lo que tenemos entre manos. Y también somos animales de costumbres, y nos gusta seguir ciertas rutinas, por los mismos motivos de antes.
Me has hecho pensar mucho....
Yo soy fiel a mi perra, aunque a veces ella no lo sea conmigo, je,je
MARA: Me gusta ver tanta coincidencia, mira por dónde. Besos!
AMOR: Pues no sé ... antes estaba en msn, pero entonces también había sido sirena ;) jejejejejeje!
AHHH: Rara tu perra oye ... que ellos son los fieles permanentes, los que nunca fallan ... hombre por dios ... vamos a tener que hablar seriamente con ella ;)
Creo que no soy tan fiel como tú, bueno, más bien que no lo soy a las mismas cosas.
No a los perros que yo soy de gatos.
No a las lilas que soy de tulipanes.
Y a quién no soy fiel es a mi melena, la he llevado corta, cortisima y ahora larga camino de larguísima.
Sabes, a veces me gustaría no ser tan fiel al recuerdo de mi ex...
Besos
Pues en este plan tu vida será dura y llena de cuernos :) BesOtes
WILLOW: Cada uno tiene las suyas ;). A mí también ...
MOE:): Dura está siendo sí. Cuernos ... a día de hoy voy salvando ;), que algún otro imbécil hay -yo he tropezado con alguno-, pero también puedo empezar a ponérmelos a mí misma verdad?
Me gusta el mar, nadar, ver como se me arrugan las manos en un baño caliente, los gatos, los perros, el color verde, los peluches de animales, leer de todo, escuchar música, las comedias románticas, Indiana Jones y Han Solo (mis héroes de la infancia), el otoño y el invierno, el frío, la lluvia, cerrar el paraguas 5 minutos antes de llegar a casa, mojarme para poder disfrutar cada segundo de cambiarme de ropa y ponerme calcetines calientes, que la gente que quiero me de buenas noticias, los críos, mirar el correo y ver que tengo carta, pasear tranquilamente por lugares donde nunca he estado, conducir, las casas rurales.....
Dark kisses
Bien por la sinceridad, Glauka. Bien por hablar de ti en esos términos tan sencillos, tan naturales.
Me ha gustado porque te he sentido cercana siendo diferentes.
Un beso.
yo también soy fiel... no sabes cómo te entiendo :-)
lua: me gustan tus gustos nena. Aquí no cuento gustos, porque esa es otra historia (al menos en mi caso), hablo de fidelidades, de necesidades de ser fiel o leal a determiandas cosas, incluso cuando me apetece variar ... Besos y besos para usted, señora oscura!
EULALIA: Si al final no somos tan diferentes unos de otros, me da a mí ;). Un beso guapísima!
SCHEHERAZADE: Pues estáis tardando! Mira que comencé y todo el post sobre infidelidades oye, y se me quedaba de un cortito que hasta vergüenzsa me dió ;).
Huyyy si yo hago una lista no me salen tantas cosas, jajaja
Soy leal como amiga (conservo a mis amigos de siempre a la vez que voy haciendo otros) pero en el resto soy muy cambiante. Todo lo intento, todo lo pruebo, soy curiosa de lo nuevo, lo diferente, soy muy ecléctica...
No tengo remedio, jeje
Un beso, Glauka
AZENA: Me alegro de no ser la única con este sentido a cuestas ;).
VALERIA: Curioso lo que apuntas, porque dentro de mis contradicciones se encuentra esa: ser ecléctica ;), porque lo de la curiosidad mató la gato debió inventarse por mi culpa ... pero ya ves, conviven curiosidad y fidelidad con una facilidad pasmosa (¿serán cosas de sirenas? ummmm creo que no)
Me gusta ver que en lo importante (o lo que yo considero importante) coincidimos en fidelidades.
La gente dice que es que soy una sentimental y cuando le cojo cariño a algo me cuesta dejarlo, y no voy a ser yo quien a estas alturas niegue lo contrario, porque sería mentirme y no tengo por costumbre semejante trampa personal.
Me cuesta cambiar según qué cosas, pero para eso tengo a Humilde, para que malacostumbre y me ayude a modificar la perspectiva con esos cambios que no me impiden seguir siendo fiel a lo que importa :)
Que mira que he tenido pocas colonias en mi vida y siempre regaladas, pero si puedo comprarme una, Carolina herrera sin dudarlo, que es la que guardo para los fines de semana ;)
No sé si es buena o mala señal, pero la verdad es que creo que somos muy iguales, quizá tristemente iguales, ya que este hecho demuestra que somos personas enganchadas a cuestiones quepueden llegar a ser sensillas...
Me atrajo mucho el sentido del amor, la fidelidad al amado y el recuerdo del ex...
Lamento no coincidir contigo en la lencería... (seguro que lo entiendes, es obvio). Pero sí coincidimos en la música, las noches de luna llena, los besos, el trabajo...
Me encantó leerte, me gusto conocerte un poco más...
Lo primero, gracias por tus visitas. Me ha gustado mucho tu texto, lo mismo empiezo a serte fiel, jeje. La fidelidad es un tema muy importante en mi vida, aunque lo sea mucho más la confianza, entendiendo, desde luego, que van emparejadas. Creo que es importante se fiel, pero lo deben merecer...
Besos desde el agua.
Me gusta lo de "tormento apasionado" ;-)
ISTHAR: Pues sí, hay cosas que son las realmente importantes, y esas son las que exigen mi fidelidad. Ahí están escondidas ... entre mis palabras sentimentaloides ;)
ALLEN: Al final todos tenemos cosas en común y es bueno descubrirlo, nos hace menos "diferntes" ;). Un beso.
ALBA: Pues algo de eso es lo que hay tras la fidelidad: la confianza, sin ella, no hay nada, al menos cuando se trata de fidelidad entres seres humanos, claro :).
A veces no depende de que se lo merezcan, simplemente es.
Besos salados para vos señorita!
ABVALÓN: Sabía yo que te iba a gustar ... pasión atormentada tampoco te describe malamente eh?
Un beso tormentoso.
Bonita lista de fidelidades... Muchas adictivas =)
Y muchas también, compartidas.
Un besazo!
Querida Sirena:
Hoy, más allá de la propia historia que envuelve tus palabras, están tus palabras.
Yo no suelo leer mucho, pero me ha parecido un relato corto muy bueno.
Claro, quizás en la vivencia que tu tienes de él esté la clave de su profundidad, porque se nota algo que sale del alma y del corazón.
Creo que es aquí, hablando de lo que vives desde esa fidelidad que le tienes a tantas cosas, donde tú eres más tu.
Un abrazo, amiga.
NAJWA: Es lo que tiene la fidelidad en ocasiones, que es adictiva ;). Besos!
RAFA: Pues sí, soy yo, porque uno es las cosas que hace y dice, y sin duda siempre los actos de uno hablan más alto y claro que las palabras de uno. Buen ojo el suyo caballero. Besosssssss
Siempre somos fieles, hasta a la alta infidelidad.
Besos.
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